El año de la rata

Francamente, me vale un carajo si ese año que lo vi, era o no era de la rata.
Cuando supe que el mundo tiene esa tendencia a ser una esfera de mierda, supe que había que hacer algo.
Y no me refiero a salvar ballenas que se terminarán extinguiendo de cualquier modo, plantar árboles que nunca crecen o limpiar a unos cuantos pájaros retardados que se les ocurre ponerse a jugar en los derrames de petróleo.
Cuando pensé que había que ayudar, sabía que lo único que puede hacer en general por todos, es intentar alegrarlos.
Una flor, un abrazo, un palmoteo de espalda; hay miles de opciones.
A lo mejor no siempre es fácil, pero cuando a uno le toque que te quieran alegrar, se cacha que esa sí es una forma de mejorar las cosas.













Solo traten que los abrazos no parezcan punteos descarados.

Rata en conserva

Y después de "pedirme" unas moneas, el sujeto encapuchado empezó a decir que me había vuelto engreído por estar estudiando y hacer como si no lo conociera. Puta... yo pensaba: como espera este weon que reconociera en él a un compañero de la básica con la cara tapada y tratando de carterearme a las 11 de la noche?


Con esa capacidad reflexiva, no me extraña que esté donde está.



Tengo más que claro que cuando estemos metidos en esos tremendos frascos, no va haber mucha diferencia entre nosotros.
Afuera de ellos hay mucha.











Al menos traten de hacer algo por mejorar lo que hay fuera del frasco en vez de quejarse tanto.








(Tributo a Ruperta, Jeff, Otto, Amalia y el Pianista, ejemplos de ratas para las generaciones venideras)